En la carrera por generar energías cada vez más limpias se está perfeccionando las baterías por gravedad, como la instalada en una mina en desuso en Finlandia, aprovechando su estructura y que ya está integrada a la red energética local, se estima que podría almacenar aproximadamente 2 MW.
Una batería de gravedad funciona de forma mecánica, cuando hay exceso de energía renovable, ésta se utiliza para subir pesos hasta cierta altura y para generar energía, los pesos se sueltan y los cabrestantes se convierten en generadores que producirían una breve ráfaga de electricidad.